octubre 03, 2007

Intimidades

Desde que creé este blog nunca publiqué nada que escapara de los temas de actualidad y cosas por el estilo. Pero, ya que siempre hay una primera vez para todo, les dejo esto que escribí hace un tiempo sobre el lugar en donde comencé a ser esto que soy ahora.

Crecí en Formosa durante siestas silenciosas y mañanas soleadas. Me hice amigo de sus calles y caminos en tardecitas de bicicleta.
Crecí en Formosa jugando entre los patios y las veredas salpicadas de mango y viento norte, mientras caía la noche tranquila descansando en el río.
Crecí en Formosa entre sus calles de tierra y zanjones adornados de trompos y bolitas.
Crecí en Formosa contando mañanas de guardapolvos y corbatas, amaneceres de amigos y lluvia solitaria.
Crecí en Formosa de rollidas raspadas y domingos de pelotas, de penitencias y regalos.
Crecí en Formosa entre primeras cartitas y miradas, primeras flores y bochazos.
Crecí en Formosa de abrazos de amigos y lágrimas, de noches de brindis y melancolía.
Crecí en Formosa de miedos y días inciertos, de despedidas y amores olvidados, de viejos chicos que se hicieron hombres.
Crecí en Formosa de futuras ausencias y reencuentros, de regresos y soledades.
Crecí en Formosa de adioses.
Crecí en Formosa y la dejé atrás una tarde, de kilómetros y kilómetros de recuerdos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

la tot@...
que lindo loco.. me gusto lo q escribiste, yo tb creci ahi.. en ese lugar.. se extraña mucho cuando uno lee cosas asi.. te mando un abrazo grande y espero encontyrarnos ahi todos juntos este fin de año y pasarla muy bien entre amigos!!!...
exitos capo!!! nos vemos..

Eduardo Roldán dijo...

Asi es querido amigo. Se extraña, pero mas se extraña a la barra de los chicos.
Espero este verano poder estar con ustedes compartiendo unos teres, muchos asados, y miles de cervezas bien frias.
Abrazo papa!